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Acude una señora a devolver un libro:
-De parte de mi hija, que a ver si compráis otro nuevo...
- º[º? (plancha total, careto de boba delante de la gente... como que nos sobraran los dineros).
La señora sale, se despide y, en ese momento, se enciende la luz:
-Señora, oiga...
-¿sí?
-Que puede decirle a su hija que también aceptamos donaciones...
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2 comentarios:
oleeeee!!!!! si es que esta chica nos ha salido muy espabilá!!! Si Señor, tacaños! que por no hacerse una fotocopia arrancan la hoja o por no comprarse el niño del pijama a rayas que vale 12 euros pueden estar viniendo a la biblioteca 4 meses y soltando improperios cada vez que les dices que está prestado... ¡hombre ya! :P
Bendita bombilla, que apunto se encendió
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